Translate

jueves, 18 de junio de 2015

El adiós

Él jamás dijo: Quédate!, No! Él no era ese tipo de persona; nada posesivo, inteligente, muy inteligente, yo nunca supe interpretar su sarcasmo. Una noche, entre risas interminables, besos desordenados, caricias descontroladas, le dije: me voy, sus ojos cambiaron de color, pero de inmediato me lanzó una sonrisa suspicaz, interpreté aquello como un: buena suerte, jamás nos habíamos despedido. No teníamos una fecha especial, no éramos novios, éramos amigos, de esos que duermen juntos, aquellos que comparten sueños. Jamás necesitamos algo más que un buen café y un poco de Sabina para amenizar la noche. Conversaciones interminables que poco a poco cayeron en la monotonía, me había ido, y él, él se quedó esperando que yo no hubiera tomado esa decisión.



No hay comentarios:

Publicar un comentario